Para finales de la edad media, la vida feudal del campo estaba fragmentada  por las nuevas unidades políticas que se asentaban en Europa,  acá entra la situación de Siena, la cual desde el siglo XII se formalizó como una república independiente, con un espacio urbano y rural definido frente a las otras repúblicas.

La unidad sentimental  de esta comunidad se constituía a través de los ritos religiosos, en especial los matrimonios, donde la vecindad se integra a través de vínculos de parentesco. Esta comunidad, a pesar de estar dentro del territorio de siena, no está delimitado por el gobierno central, sino que su formación se debe a la unidad de vínculos económicos y sentimentales entre vecinos; estos vínculos económicos por ejemplo, estaba definidos a un término de tierras, ya fuera por ser una tierra de común explotación o una aglomeración de pequeñas propiedades que formaban una vecindad