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El espejo y la mujer

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Los espejos como utensilio de tocador y objeto manual se usaron en distintas culturas desde la antigüedad. Generalmente, eran hechos con metal bruñido, como cobre, plata o bronce. En la mayoría de culturas tenían forma de placa redonda u oval, en algunos casos decorada con grabados o relieves mitológicos. Las personas que más usaban este elemento eran las mujeres. El hecho de que se encuentre en este fresco y lo sostenga esta figura hace evidente que este objeto era visto como un elemento que individualizaba, ya que se le daba más importancia a la persona reflejada que a los demás, es decir, era alguien egocéntrico, vanidoso, por ende todo lo contrario al bien común, que para Lorenzetti era lo que mantendría la paz y armonía en la ciudad.  El espejo presenta a los ojos una realidad engañosa, se relaciona con la mentira y las visiones.  El espejo no solo emula la realidad, también la distorsiona, la modifica a los ojos de los seres humanos, por esto sirve de puente hacia lo desconocido.

Explora el mundo del personaje:

Lorris, G. (1225-1280) Ilustración del libro “Roman de la rose”.

Lorris, G. (1225-1280) Ilustración del libro “Roman de la rose”.

En la Grecia antigua el espejo era considerado un instrumento estrictamente femenino. Como el varón se enamoraba de mujeres (y no de hombres), al que se contemplara en el espejo se le juzgaba de afeminado. La mujer se mueve entre lo sagrado y lo profano. Su naturaleza tiende hacia lo divino pero también hacia lo demoniaco.

Nicolás Bataille, La gran prostituta peinándose frente a un espejo. Tapiz del Apocalipsis, 1373-1379

Nicolás Bataille, La gran prostituta peinándose frente a un espejo. Tapiz del Apocalipsis, 1373-1379

La mujer que se contempla en el espejo está presente en una basta iconografía, esta relación se asocia con la tendencia de la mujer hacia la contemplación, lo que la conduce a la vanidad, al orgullo, a la envidia y la lujuria. La mujer que se mira en el espejo se pierde en el engaño producido por este, de tal manera que el demonio, señor del engaño, puede acceder más fácilmente a ella.

A Siren and a Centaur. (1270)

A Siren and a Centaur. (1270)

Los espejos comparten con las mujeres la duplicidad de su naturaleza, son asociados con lo divino: la creación de Dios es un espejo en donde éste se refleja, y es a través de este reflejo que el ser humano puede llegar a conocerlo. Pero también son objetos misteriosos que reflejan una realidad transformada, mentirosa. Se dice que las brujas utilizaban los espejos para atraer al demonio en él y luego someterlo a su voluntad.

Bodleian Library, MS. Ashmole 1511, Folio 65v

Bodleian Library, MS. Ashmole 1511, Folio 65v

Puede creerse que los espejos son de uso común, pero en la Edad Media sólo se encontraban en casas adineradas o palacios pues era un objeto de lujo. Entonces, para representar a las mujeres que no seguían el modelo mariano se les pintaba como sirenas seductoras que tenían en su mano un espejo .

Jeniffer Lizcano Cubillos

Erika Viviana Morales Tamayo

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